El pasado mes de septiembre, mi sobrina Ainhoa, su novio Rubén y
unos amigos realizaron una parte del Camino de Santiago, más concretamente el
Camino del Norte.
En una de sus etapas llegaron al Monasterio Cisterciense de Santa María de Sobrado en Sobrado dos Monxes (A Coruña) y es de allí de donde me trajo este bonito pin.
¡Muchas gracias Ainhoa!
Sobrado dos
Monxes es un hermoso pueblo en la frontera entre A Coruña y Lugo. Este
lugar de comarcas verdes y onduladas, tiene elevada importancia en la
fisionomía de Galicia, ya que es aquí, donde nacen el río Mandeo y el conocido
río Tambre, que con sus aguas riegan los campos gallegos, hasta desembocar en
el océano atlántico.
En Sobrado dos Monxes se encuentra también, una de
las joyas del barroco gallego, el monasterio
de Sobrado, obra que conviene no perderse. La fachada principal es uno de
los mejores logros del siglo XVII. Dos macizas torres cuadradas ciñen la
espléndida portada: dos pares de columnas gigantes y, en medio, una hornacina
con una imagen formada por columnas salomónicas.
El interior del templo es también grandioso y
solemne: gruesos pilares que soportan una elevada bóveda y elementos
arquitectónicos tratados con exactitud y
acierto. La Capilla Mayor es una obra maestra del Renacimiento gallego,
mientras que la Capilla del Rosario es una magnífica pieza del barroco. La
Capilla de la Magdalena, de origen gótico, tuvo que ser reconstruida a
principios del siglo XVI. El bello Claustro de las Procesiones, renacentista,
da paso a la sala Capitular, de época románica, y también a la interesante
cocina del convento.